Blackrock, un gigante de la gestión de activos, amplía su huella en el campo de la criptomoneda al lanzarse a la tokenización de los activos del mundo real. Después de introducir un fondo de bitcoin, Blackrock anunció el lanzamiento de su primer fondo de activos tokenizados en la cadena de bloques Etereum, llamado « BUIDL » (Blackrock USD Institutional Digital Liquidity Fund). Este fondo permitirá a los inversores institucionales que tengan sus fichas percibir rendimientos en dólares procedentes de efectivo o de bonos del Tesoro americano, funcionando así como un stablecoin respaldado por el dólar.
La tokenización consiste en representar activos reales, como bonos o bienes inmuebles en una cadena de bloques, convirtiendo los derechos de propiedad en fichas intercambiables. Esta tecnología tiene como objetivo democratizar el acceso a inversiones tradicionalmente reservadas a una élite, permitiendo a todos participar en estos mercados a través de transacciones transparentes y seguras.
Aunque la tokenización se presenta como una oportunidad de inclusión financiera, el fondo de Blackrock sigue siendo accesible por el momento solo a clientes adinerados. Otros actores del sector financiero, como Citi y JPMorgan, ya han ofrecido ofertas similares a sus clientes. El mercado de bonos del Tesoro de Estados Unidos, en particular, está creciendo de 100 millones de dólares a principios de 2023 a 730 millones de dólares hasta la fecha, según Coindesk.